hielos

La Antártica mantiene el 70 % del agua del planeta o, dicho de otra forma, el 90 % de todo el hielo mundial. Si éste llegara a derretirse instantáneamente, el nivel del mar subiría en todo el mundo unos 55 metros.



El hielo constituye el elemento más típico del paisaje antártico. Este grueso y pesado manto, con un promedio de 2 mil metros de espesor (alcanzando a veces los 4.500 m), se desliza con lentitud desde el centro de la meseta hacia la periferia, a una velocidad entre los 100 y los 1.000 metros por año, hasta cubrir el continente en un 98 %.

Más allá de la costa, la masa helada forma extensas ‘barreras’, llegando a constituir una superficie adicional, equivalente al 10 % del continente mismo. Por otra parte, al desprenderse hielos desde los glaciares, éstos se transforman en gigantescos témpanos o icebergs, que flotan siguiendo las corrientes marinas y los fuertes vientos.